Hombre, claro que hay piezas de grandes firmas que aparecen en la serie, supuestamente la versión indie de Sexo en Nueva York. Yo más bien diría que es una patada en la boca a Sexo en Nueva York, donde la única que merecía la pena era Samantha, de quien tenían que haber hecho un spin-off sin duda. Al fin y al cabo, me parecía el personaje más creíble y divertido de aquella época de resplandor económico, un tiempo que coincidió con la popularización de aquello de "lo alternativo", "underground" o "grunge", una cuadrillita que ya venía avisando de lo que iba a caer quince años después. Esa pandilla ahora es indie, sus miembros se comunican vía Iphone, tienen hijos y casonas en la costa oeste y macrofestivalean como nunca ante masas que cada día sudan menos y que acuden a los conciertos como quien sale una noche de fiestas de Bilbao. Lo indie se ha vuelto cool, Inditex lo confirmó hace tiempo y yo también viendo lo mucho que se ha democratizado el tema de la música en directo, cosa que no me parece mal. Hoy en día, si un grupo como el irrepetible Los Bichos tocara en el Antzoki, no sería raro ver a Hannahs, Jessas, Marnies o Shoshannas vascas en el bolo.
Voy a empezar por Jemima Kirke, Jessa en la serie. Es el desc*j*no padre y me parto con ella, aquí estoy yo con mis trapos, gasas, trenzas y kimonos que voy a poner de moda, al igual que el chorizo de Ibiza y poner en evidencia a panolis con dinero que ven una chica guapa y enseguida se les derriten todos los MBAs y doctorados en la poca cabeza que luego tienen para la vida en común. Si alguien me consigue un vestido así igual hasta me caso, jejeje...
Jessa también se ha pasado al flequillo, algo que me gustaría ver en Marnie (Allison Williams), la lady, la Brooke Shields, la girlfriend of America de GIRLS. Me gusta el estilo que tiene en la serie, pero arriesgan poco con la ropa de su personaje, una chica con pinta de niña y señorita buena que no lo es para nada y a quien le va la marcha como nadie en la cama a pesar de su pinta de "estrecha que no veas". Me gustan mucho estos dos modelos en verde coral, que le sientan de cine.
Marnie, a quien echan de la galería en la que trabaja y acaba de azafata-anfitriona-medio camarera en un club selecto... y se pasa media temporada con el uniforme de trabajo, un conjuntito en plan botones de hotel sexy. Me desternillo, de verdad, estas chicas son la bomba.

Y la cerebro de la serie: Lena Dunham, la tierna y adorablemente egocéntrica Hannah, escritora junior que se empeña en demostrar todo el tiempo que es indie (esta si que es independiente de verdad, jeeesús que modelitos tan... floridos) y que no es tan guapa y delgada como sus amigas pero se la repatea (no maja, eso nos importa a todas, aunque tarde o temprano nos aceptemos). Pues lo siento Hannah, porque no eres fea por mucho que insistas en serlo. Yo te pongo vestidos chulos y te pinto los ojos y te dejo hecha una beauty... ah, no, que ya te lo han hecho, dices. ;)
Es la creadora de la serie y ganadora de un premio en el South by Southwest por su primer filme, Tiny Furniture. Otro tema es que estas cuatro actrices tienen todas una familia... muy artística (más sobre eso aquí), por resumir y por no aburrir con aquello de que el arte es burgués y la vida, irónica. Que disfrutéis con GIRLS porque os vais a reír mucho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario